La joven universitaria Nesrin Abdi decidió unirse al ejército para defender a Kobane, la emblemática ciudad de los kurdos ubicada entre Siria y Turquía. A sus 20 años no le teme al Estado Islámico y está dispuesto a entregar su vida para que los yihadistas no invadan su tierra natal.

“Todo el mundo sabe lo que sucede si caes en manos del Estado Islámico. Para una mujer es violación, seguido por decapitación. Todos hemos visto los videos de los rehenes estadounidenses y británicos decapitados en el desierto. Ellos nos tratarán igual”, reconoce Nesrin Abdi en declaraciones para Dayli Mail.

Esta valiente mujer se levanta también en contra de la violencia y los abusos de los radicales islamistas que tratan como esclavas a los de su género. “Las mujeres kurdas han luchado duro para demostrar su igualdad y esta lucha es un símbolo de nuestra libertad”, manifestó.

Ella ha dejado a su familia y sus estudios para unirse a la guerra, pero asegura que cuando este conflicto acabe volverá a la universidad.

Las fuerzas kurdas pelean para que Kobane no caiga en manos de los yihadistas. Ahora son aliados de los Estados Unidos, que atacan al Estado Islámico con bombardeos.