Miles de usuarios podrían quedarse sin conexión a Internet el lunes si su ordenador ha sido infectado con el virus DNSChanger y no lo han depurado, ya que el FBI cerrará los servidores que abrió temporalmente para proteger a los usuarios.

El FBI, las asociaciones de consumidores y los cibernautas han advertido con tiempo para evitar que esto pase, pero se calcula que unos 200.000 usuarios podrían seguir infectados.

El virus se dio a conocer en noviembre cuando el FBI anunció la detención de sus creadores, seis estonios y un ruso, que a través del “malware” redirigían los ordenadores infectados a direcciones no deseadas para embolsarse compensaciones por el número visitas, por las que se embolsaron al menos 14 millones de dólares.

El FBI creó la página web (www.dcwg.org) que ayuda a los usuarios a determinar si sus ordenadores podrían estar entre los afectados por la trama.

El virus modifica la configuración DNS (sistema de nombre de dominio) para que se navegue a través de servidores fraudulentos controlados por los atacantes.

Por eso, tras la operación el FBI activó de manera temporal varios servidores que reconducían a una página segura a los equipos infectados y darles tiempo a limpiar sus archivos.

Los servidores DNS controlados por el FBI y el consorcio de sistemas de internet (ISC) iban a ser cerrados en marzo, pero se dio de margen hasta el 9 de julio para que los usuarios revisaran sus ordenadores.

Para saber si el equipo informático está infectado, los internautas pueden dirigirse a la web (https://www.dns-ok.us/) y posteriormente a (http://www.dcwg.org/detect/), donde se recomiendan formas de eliminar el virus informático, que afectó 4 millones de computadores en más de 10 países.

Fuente: EFE