Desde el 27 de enero la situación de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos cambió y para el gobierno del presidente de México , Enrique Peña Nieto, estos fueron asesinados cruelmente por el grupo criminal Guerreros Unidos .

En este contexto, la captura del miembro de Guerreros Unidos Felipe Rodríguez Salgado, alias El Cepillo, juega un papel fundamental, sobre todo luego de una polémica confesión.

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“El Chucky [su jefe] me llamó por teléfono y me dijo que me iban a entregar dos paquetes con detenidos y que eran de Los Rojos (…) Eran entre 38 y 41, no los conté; al llegar al basurero de Cocula, bajamos a los estudiantes de las camionetas. Me percaté de que algunos, los que estaban abajo, ya habían muerto, creo que por asfixia. Quedaban vivos unos 15 a 18 estudiantes (…). Le encargué a El Pato que se hiciera cargo (…) El Pato ya había acostado a cuatro detenidos y les disparó en la nuca”.

La declaración del criminal va a acorde con lo informado por las autoridades mexicanas: que los asesinatos se debieron a una terrible confusión: los sicarios de Guerreros Unidos confundieron a estudiantes por integrantes de un cartel rival, Los Rojos.

Fuente: La Nación.

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