La Procuraduría General de la República (PGR) y la Secretaría de Seguridad Pública Federal (SSP) detuvieron al policía estatal de Nuevo León, Miguel Ángel Barraza Escamilla, por su presunta responsabilidad en ayudar a los autores materiales de atentado en el Casino Royale, donde 53 personas perdieron la vida, en México.

Investigan a toda una red de protección policial que pudiera estar involucrada con la organización criminal de “Los Zetas”, que dio la orden para quemar el casino en sus pretensiones de extorsionar al propietario Raúl Rocha Cantú.

El subprocurador de Control Regional, Procedimientos Panales y Amparo de la PGR, José Cuitláhuac Salinas, precisó que la detención de Barraza Escamilla la realizaron agentes de la Policía Federal en la ciudad de Monterrey, la noche del jueves, informó Efe.

Información de inteligencia permitió conocer que “éste se desempeñaba como policía estatal de Nuevo León y tripulaba, el día del atentado, 25 de agosto, el automóvil Bora blanco que se caracterizaba por tener una bola de billar en la antena”.