Se acota la búsqueda en el Océano Indico del avión desaparecido de Malasia. Tras captar posibles señales procedentes de sus cajas negras, las autoridades australianas encargadas de dirigir el rastreo ya tienen un poco más claro dónde puede hallarse el vuelo MH 370 de Malaysia Airlines.

Según informó este jueves el centro de mando en un comunicado, un avión AP-3C Orión ha captado otra posible señal en las cercanías del barco ‘HMAS Ocean Shield’, que a su vez ha detectado ya cuatro pulsos que podrían proceder de las cajas negras. Dos de ellos fueron recibidos el martes por la tarde y por la noche, durante cinco y siete minutos respectivamente. Las otras señales fueron escuchadas el sábado y el domingo, una de ellas durante más de dos horas, a unos 4.500 metros de profundidad.

“Los datos acústicos requieren un análisis más completo pero potencialmente parecen venir de una fuente hecha por el hombre”, anunció el máximo responsable del dispositivo internacional de búsqueda, el mariscal retirado del Aire Angus Houston.

Para captar más señales, el ‘Ocean Shield’ continúa arrastrando una sonda submarina en el extremo norte de un corredor que, en su vertiente sur, también es rastreado por el buque chino ‘Haixun 01’ y el navío británico de investigación oceanográfica ‘Echo’. Además, diez aviones militares, cuatro civiles y trece barcos han participado este jueves en la búsqueda, cuya área se ha reducido a 57.923 kilómetros cuadrados y dista 2.280 kilómetros al noroeste de Perth, en la costa occidental de Australia. Allí se sospecha que se estrelló el vuelo MH 370 de Malaysia Airlines porque es el último lugar donde lo localizaron los satélites espaciales tras desviarse de su ruta el pasado 8 de marzo.

Con 239 personas a bordo, el avión cubría la ruta entre Kuala Lumpur y Pekín cuando, poco después de despegar, cortó sus transmisiones y, por motivos aún desconocidos, voló durante horas con un rumbo completamente opuesto. Un misterio en el que los investigadores barajan todas las opciones, desde una avería o un incendio eléctrico que mató a los ocupantes del avión mientras seguía navegando con el piloto automático, hasta un secuestro pasando incluso por el suicidio de alguno de los dos pilotos.

Si, finalmente, se confirma que las señales son de las cajas negras del aparato, un Boeing 777-200ER, el ‘Ocean Shield’ desplegará un sumergible teledirigido, el Bluefin 21, que puede bajar hasta 4.500 metros de profundidad para localizar los restos del avión en el fondo del océano. Ambas cajas, que graban los datos del vuelo y las conversaciones de los pilotos en la cabina, son cruciales para resolver el misterio que rodea a la desaparición del fatídico vuelo MH 370.

Fuente: ABC