El jefe de la policía malasia, Khalid Abu Bakar, dijo que las autoridades estaban exhumando los restos y que todavía no sabían con exactitud cuántas personas había enterradas en las fosas, situadas en un área montañosa de la selva de muy difícil acceso.

Los primeros datos de la investigación parecen señalar algunas similitudes con los campos encontrados a principios de mayo por la policía tailandesa, que encontró fosas que se cree que contenían cadáveres de migrantes rohingya y bangladesíes.

El hallazgo desveló todo el sistema de tráfico de personas entre países de la región. Las autoridades “hallaron 139 supuestas fosas. No pueden precisar cuántos cadáveres hay en cada fosa”, señaló Abu Bakar, y añadió que los 28 campos de detención descubiertos tenían una capacidad para albergar a cientos de personas.

TAMBIÉN PUEDES LEER: Malasia: Seis años de cárcel por robar a pasajeros del vuelo MH370

El mayor campo de detención podría haber albergado hasta 300 personas, otro tenía capacidad para unas 100 y el resto podía acoger unas 20 cada uno, precisó el funcionario.

Poco antes de la rueda de prensa, el primer ministro malasio, Najib Razak, había mostrado su profunda preocupación por el primer hallazgo de fosas comunes. “Encontraremos a los responsables”, prometió.

Tras el descubrimiento de las primeras fosas a principios de mes, Tailandia empezó a reprimir a los traficantes, quienes abandonaron al parecer sus embarcaciones dejando a centenares de migrantes ilegales a la deriva y provocando el caos en la región.

TE PUEDE INTERESAR: Malasia: Confirman pena de muerte para tres hermanos mexicanos

Malasia, Indonesia y Tailandia rechazaron acogerlos en un principio pero los dos primeros acabaron cediendo a la presión internacional ofreciéndoles una acogida temporal.

La ONU estima que 2.000 personas siguen a la deriva en el mar, en un momento crítico ya que se acerca la temporada de los monzones. En las últimas dos semanas más de 3.500 personas lograron llegar a las costas de Indonesia, Tailandia y Malasia.

Los migrantes son bangladesíes que huyen de la miseria en su país y miembros de la comunidad musulmana rohingya, marginada en Birmania y sin derecho a tener la nacionalidad de este país.

Fuente: Agencia Andina