Un avión de British Airways que partió de Hong Kong el pasado 5 de mayo con 22 llantas redondas, aterrizó en el aeropuerto Heathrow, en Londres, con un neumático cuadrado, sorprendiendo a más de uno. Esto tiene una explicación.

De acuerdo a The Aviation Herald, la tripulación del Airbus A380 había recibido una alerta sobre la presión de la llanta luego del despegue. Sin embargo, la tripulación decidió continuar con el vuelo, aunque pidió que un remolcador estuviera disponible en el aeropuerto londinense en caso se produzca alguna emergencia.

Cuando la aeronave aterrizó, pudo moverse sin problemas a la puerta. Posteriormente, se descubrió que el neumático derecho exterior se había desinflado arriba y abajo, tomando una forma cuadrada.

“Es un caso curioso. Nunca había visto algo así”, manifestó un portavoz de la Autoridad de Aviación Civil al Daily Mail.

En tanto, Kumar Mysore, de la Sociedad Aeronáutica Real, señaló al mismo medio periodístico que la forma cuadrada podría deberse a cómo el peso de la aeronave se distribuye sobre un neumático desinflado.

“Uno puede ver que la rueda no está dañada en absoluto, pues está diseñada para soportar el peso. El efecto es el mismo que cuando uno presiona un anillo de caucho con diferente intensidad: puede cambiar de forma. En un A380, en esta situación en particular, el neumático queda cuadrado”, comentó.

En ese sentido, aseguró que “los pilotos están bien entrenados para manejar tal situación de forma segura”, por lo que el vuelo no estuvo en peligro.

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