El secuestro por la rama libia del grupo terrorista Estado Islámico (EI) de la pareja norcoreana, ocurrido el sábado 23 de mayo, aunque todavía no ha sido confirmado oficialmente por el Gobierno de Corea del Norte, es el primero conocido de ciudadanos de ese país.

Entre 300 y 400 norcoreanos, según la agencia surcoreana Yonhap, residen en Libia, un país cuyo anterior régimen de Muamar al Gadafi mantenía fuertes lazos con el Estado comunista de Kim Jong-un.

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El analista Shin In-Gyun, de la organización civil Red de Defensa de Corea en Seúl, recuerda que el régimen de los Kim “nunca acepta condiciones en sus negociaciones”. De este modo, considera que existen “escasas posibilidades de que sean puestos en libertad, ya que el EI generalmente exige a cambio ciertas compensaciones, como sumas económicas”.

Además, explica, “para el Estado norcoreano los médicos no se consideran tan importantes como los altos funcionarios del Partido de los Trabajadores o del Ejército”.

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La misma postura mantiene el profesor Lee Yang-soo, del Instituto de Política y Economía Seorak en Seúl, que cree que el EI “trata de secuestrar a cualquier extranjero y utilizarlo como moneda de cambio”, algo imposible si toca negociar con el estricto régimen de los Kim, declaró a la cadena surcoreana YTN.

El profesor apunta, sin embargo, que “tampoco se puede descartar la hipótesis de que el grupo terrorista secuestrara a la pareja de norcoreanos por haberlos confundido con ciudadanos de Corea del Sur”, un país que cuenta con abundantes recursos económicos y ya ha pagado rescates con anterioridad.

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Otra posibilidad menor es que “el Estado Islámico les haya secuestrado con fines específicos, como sería el caso de un reclutamiento forzoso de médicos para tratar a sus combatientes”, sostiene el analista Shin In-Gyun.

El médico, que trabajaba en el hospital de la ciudad libia de Sirte, y su esposa fueron secuestrados por un grupo de hombres armados cuando abandonaban el centro médico para dirigirse a Trípoli, según informaron fuentes de Seguridad libias.

Fuente: EFE

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