La justicia británica ha condenado a 22 cadenas perpetuas a Richard Huckle, considerado uno de los peores pederastas del país. El ciudadano británico, de 30 años, habría violado a casi 220 menores de edades comprendidas entre los 6 meses y los 12 años en Malasia y Camboya. Se hacía pasar por fotógrafo y por un cristiano profesor de inglés para atraer a sus víctimas, generalmente de bajos recursos.

Según informa el diario ‘The Telegraph’, este sujeto pasó diez años en el sudeste asiático y fue detenido en 2014 por miembros de la Agencia Nacional contra el Crimen del Reino Unido (NCA, por sus siglas en inglés) cuando se disponía a regresar a su país.

Durante su captura los agentes se incautaron de un portátil que contenía más de 20 mil fotografías y videos de sus víctimas y un libro de su autoría sobre la relación entre la pedofilia y la pobreza.

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