“Me encantaría tener la cirugía, pero he perdido toda esperanza. Casi me muero última vez que tuve la cirugía por lo que nada se puede hacer para esta cara”, expresó resignado este hombre de 35 años de edad. Su tratamiento costaba 15 mil rupias (148 euros) que sus padres, ya fallecidos, no pudieron pagar.

El extraño mal surgió cuando Lal tenía 8 años de edad. Un cirujano que lo atendió advirtió que si esta enfermedad continúa progresando, el hombre podría desarrollar ulceraciones y complicaciones infecciosas, incluso podría morir por las condiciones en que vive.