El fotógrafo y aviador capturó la espectacular imagen de una tormenta cuando sobrevolaba en un Boeing 767-300 el Océano Pacífico, al sur de Panamá.

“Para mi esa fotografía es una visión rápida del planeta Tierra: gigante, imponente, hermoso por sí solo, que si se lo respeta se pueden circunvalar sus peligros y admirar su belleza”, comentó Borja a La Vanguardia, quien tomó la foto cuando se encontraba a 37.000 pies de altura.

Asimismo, explicó que tomó la imagen en el momento justo cuando un relámpago iluminó el cielo.

“La foto es todo menos casualidad. Es cierto que hay muchos factores que no se pueden controlar y son solo suerte, pero también he pasado años intentando hacerlo, mejorando mi técnica, hasta que por fin obtuve el resultado que quería”, dijo el aviador.

Borja reconoce que aunque no tiene pensado dejar su carrera como aviador para dedicarse a la fotografía a tiempo completo, sí ha meditado en combinar su afición con su profesión actual.