El hecho ocurrió durante una protesta multitudinaria por la falta de vivienda, el desempleo y la pobreza. Según los informes, al menos 50 personas resultaron heridas en los enfrentamientos.

En un momento, un manifestante extranjero empezó a reprender a un policía y le preguntó de por qué estaba agrediendo a la gente: “¿Por qué haces esto? ¿Por qué nos haces daño?”.

El agente de seguridad se mantuvo firme: “Yo soy policía, solo estoy haciendo mi trabajo”. Dijo que se dedica a mantener la paz, y que tenía órdenes que cumplir.

Sin embargo, el manifestante extranjero siguió preguntándole. El policía no aguantó más la presión, tiró su escudo y comenzó a llorar desconsoladamente.

En medio del caos, dos manifestantes abrazaron al policía y le aseguraron que todo estaría bien. Una mujer lo reconfortó mientras le daba un pañuelo para que se secara las lágrimas.

Según los medios locales, el agente de seguridad se llama Joselito Sevilla y se trataba de su primera asignación en la dispersión de manifestantes.

Fuente: Actualidad.rt