Dilma Rousseff. La mandataria brasileña es una mujer discreta en su estilo de vida y personal. Pero en su vista a Roma hace dos semanas, para asistir a la misa de inauguración del Papa Francisco, reservó 52 habitaciones en un hotel de lujo e hizo uso de 17 autos en su estancia de tres días en el Vaticano.
Cristina Fernández. La viuda de Néstor Kirchner se traslada todos los días de la residencia oficial de Olivos a la Casa Rosada en helicóptero y tiene cuatro aviones oficiales a su disposición. También usó jet privados con dinero del Estado.
Evo Morales. Uno de los gastos innecesarios que le achacan al exlíder cocalero son los viajes de los dirigentes de los sindicatos que lo apoyan* y que son pagados por el Estado. Al iniciar su segunda gestión, adquirió un avión Falcon 900 EX Easy de US$93 millones, que fue fabricado para el Manchester United.
Rafael Correa. Se compró un apartamento de 170 mil euros en Bélgica hace dos años, con el dinero ganado en un juicio contra el Banco Pichincha. Su patrimonio total en 2011 ascendió a más de 617 mil 911 dólares.
Daniel Ortega de Nicaragua. Tras su retorno al poder en 2007, Ortega es señalado por ir en sus viajes oficiales con toda la familia (esposa, ocho hijos, nueras y nietos) con lujos “como si fuesen los reyes de Arabia Saudí”.
Hugo Chávez. El fallecido mandatario de Venezuela se destacó por llevar trajes costosos, relojes de marca, hacer viajes por el mundo en jet privados y regalar dinero a manos llenas a sus aliados políticos y artistas de Hollywood mientras predicaba que “ser rico es malo”.