Dentro de aproximadamente 5.000 millones de años, la galaxia en la que vivimos, la Vía Láctea, chocará con la galaxia de Andrómeda. ¿Qué pasará entonces? Los humanos aún no hemos podido captar completamente uno de estos fenómenos cósmicos en directo, pero sí hemos podido examinar sus restos y situación actual.

La opción más probable es que Andrómeda, que es mucho más grande, devore la Vía Láctea. Nuestra propia galaxia, de hecho, devorará dos galaxias enanas, las nubes de Magallanes, antes de perecer a manos de su vecina Andrómeda.

No es la primera simulación que se ha hecho intentando comprender cómo será ese choque entre galaxias, pero esta que se muestra en el video, desarrollada por científicos del Centro Internacional de Investigación en Radio Astronomía (ICRAR), es una de las que mejor lo explican.

Las observaciones más recientes hechas con el Hubble sugieren que Andrómeda y la Vía Láctea pasarán una al lado de la otra (en términos astronómicos) dentro de unos 3.000 millones de años, para alejarse, volverse a aproximar y colisionar definitivamente dentro de unos 5.000 millones.

El impacto generaría numerosas nuevas estrellas, y enviaría gases hacia el exterior formando, muy probablemente, nuevas galaxias satélite.

Finalmente, se cree que los agujeros negros supermasivos que hay en el centro de las dos galaxias se combinarían para formar una nueva galaxia elíptica gigante llamada Lactómeda. La Tierra, si sigue existiendo para ese entonces, será ya inhabitable debido al aumento de luminosidad y calor del sol a medida que envejece.

Fuente: Es.gizmodo.com

Andromeda and the Milky Way Collide! from ICRAR on Vimeo.