El grupo terrorista autodenominado Estado Islámico nuevamente mostró la extrema violencia con la que opera en la ciudad occidental iraquí de Al Baghdadi con el asesinato de 43 personas, a los que quemó vivos tras mantenerlos secuestrados durante más de una semana.

En esta ocasión, al igual que las anteriores, se emitió un video de buena producción, musicalizado, donde se aprecia que los futuros ejecutados son puestos en celdas individuales y son paseados por la ciudad.

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Sin embargo, en esta ocasión no se mostró la violenta ejecución, como sí ocurrió con el piloto jordanio Muaz Kasasbeh, quien fue ejecutado el pasado martes 3 de febrero.

Una fuente de seguridad informó que los fallecidos eran en su mayoría policías y miembros de los Consejos de Salvación (milicias sunitas progubernamentales) que luchaban contra el Estado Islámico en Al Baghdadi, situada en la provincia occidental de Al Anbar.

Fuente: Infobae.