Las imágenes muestran una serie de bombas de fabricación casera por la filial del Estado Islámico en Libia, así como granadas de mano toscamente hechas a medida de las bombas de presión.

Descrito como un viaje dentro de uno de los talleres de explosivos en el estado de Trípoli, las fotos personifican la creciente amenaza de la violencia que envuelve actualmente al país del norte de África, tras el derrocamiento de Muamar Gadafi.

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Mediante el uso de un guante quirúrgico blanco para evitar que los productos químicos tóxicos entren a la piel, el fabricante de bombas muestra cómo se llena el cono de una bomba con un polvo explosivo amarillo.

Otro trabajador muestra el uso de herramientas de precisión para la preparación de las bombas, incluyendo una amoladora para elaborar cuidadosamente los explosivos.

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Las fotos llegan en un momento en que el Estado Islámico construye una peligrosa reputación en el norte de África, en particular en Libia, país devastado por la guerra civil.

Desde que asumió el control de la ciudad costera de Derna, en el este de Libia, el grupo extremista ha estado ocupado inculcando su brutal interpretación de la radical ley sharia.

Fuente: Daily Mail