Un grupo de soldados kurdos recuperó la foto de una bebé llorando a punto de ser decapitada por un miembro del grupo terrorista Estado Islámico.

La imagen se encontraba en el celular de un yihadista que fue abatido durante los últimos enfrentamientos en Kobane, frontera siria con Turquía.

En la foto se observa a la bebé llorando pidiendo socorro, mientras un yihadista sostiene su cabeza contra el suelo y apoya un cuchillo en su cuello. Eso es todo lo que se ve y se sabe muy poco de su destino final.

Se cree que la fotografía fue tomada el viernes pasado. Su cuerpo no fue encontrado. Los kurdos que han subido su foto a Facebook la han apodado Melek, que significa ángel, confiados en que tal vez se haya salvado milagrosamente.

Pero esta no es la única foto que hallaron en el celular de este terrorista, hay otras que sí muestran decapitaciones y cómo juega fútbol con las cabezas cortadas a sus víctimas.