B.B. es una perrita de raza caniche que se ha pasado la vida encerrada en una jaula en el sótano de un criadero ubicado en , el cual fue intervenido y desmontado en septiembre pasado por la Sociedad Humana de (HSUS).

De acuerdo con la versión de los empleados, la perrita había sido usada para criar una vez tras otra. “Era diminuta, parecía una criatura indefensa”, dijo Jessica Lauginger, gerente de crímenes contra animales en HSUS, a .

La perrita fue llevada al Hospital de animales Cabarrus. Brenda Tortoreo, que trabaja en ese lugar como recepcionista, se mostró muy interesada por B.B. “Estaba en una esquina. Daba pena, estaba aterrorizada. Me dije que esa era la que me iba a llevar a casa”.

Inicialmente, la perrita se sentía muy confundida al estar en la casa de Tortoreo, ya que había pasado toda su vida en una jaula.

“Puse a B.B. en el suelo y no hacía más que dar círculos caminando. Creo que eso es todo lo que sabía hacer. Nunca supo lo que era el sol. No sabía lo que era el césped y le daba mucho miedo”, dijo.

Sin embargo, poco a poco, B.B. se fue acostumbrando a su nueva vida. De acuerdo a Tortoreo, “ahora corre por la casa” y “ha salido de su caparazón”.

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