Ian Richards, habitante de Canterbury pasará las fiestas navideñas en la cárcel por el cultivo de una planta de cannabis, que llegó a tener una altura de 1,5 metros. Lo curioso es que el hombre decoró con adornos y bolas de Navidad la planta de marihuana.

Cuando la Policía ejecutó una orden de allanamiento de su casa se encontró con que tenía una fábrica hidropónica. Según Derren Dennett, uno los agentes que investigaron el caso, “tener una planta de estas dimensiones es un insulto a la ley”.

Asimismo, los agentes encontraron durante el allanamiento una fábrica de cannabis, cuya captura evitará que “bastante droga” llegue a las calles.

Por esta situación, Richards ya está encarcelado en el centro penitenciario de Canterbury. Permanecerá 18 meses en prisión.

Fuente: Antena 3