Para el alcalde de West, Tommy Muska, la poderosa explosión que provocó una bola de fuego de unos 30 metros de ancho y luego una nube en forma de hongo fue “como si una bomba nuclear hubiera estallado”, según expresó en declaraciones a CNN.

Según la prensa local, las ventanas de las viviendas en los alrededores estallaron por la onda expansiva de la explosión.

“Terminé tirada en el piso. Es como si hubiesen levantado la carretera”, relató Cheryl Marich, cuya casa fue destruida.

Otro testigo, Bill Bohannan, contó al Waco Tribune-Herald que “cada vivienda en unas cuatro calles al alrededor fue afectada”.

El Servicio Geológico de los Estados Unidos registró la explosión como sismo de magnitud 2,1.

“Fue como una bomba que explotó”, dijo Barry Murry, un residente que vive a una milla de la planta.

Fuente: Infobae y Agencias