Como se recuerda, dicha norma era una enmienda a la Constitución de California que prohibió en 2008 las bodas homosexuales en ese estado.

En una decisión de 5-4, el Supremo invalidó una decisión de una corte federal de apelaciones de California por considerar que los demandantes en el caso no tenían base para apelar, y da instrucciones a ese tribunal para que invalide la Proposición 8.

La Proposición 8, que limita el matrimonio a la unión entre un hombre y una mujer, fue votada y aprobada en referéndum en 2008, seis meses después de que la legislatura estatal californiana aprobara el matrimonio homosexual.

Un tribunal federal de San Francisco invalidó la medida en 2010 por considerar que discriminaba de forma injusta a los homosexuales que deseaban casarse.

Ante la negativa del gobernador del estado, Jerry Brown, y sus funcionarios, de defender la Proposición 8 en los tribunales, un grupo de oponentes del matrimonio homosexual continuó apelando el caso hasta llevarlo un tribunal federal de apelaciones del noveno circuito de California, que declaró inconstitucional la medida.