Los bomberos, pertenecientes a un cuerpo de élite, se han visto atrapados por el incendio forestal que se propagó rápidamente con la ayuda de fuertes vientos en un área conocida como Yarnell Hill.

Un funcionario de la división forestal, Art Morrison, dijo que los bomberos fallecidos trabajaban en crear un cortafuegos. “Evidentemente, su zona de seguridad no era lo suficientemente amplia y el fuego los atrapó”, dijo a CNN.

El incendio provocó, además, la evacuación de residentes de la pequeña localidad de Yarnell, situada a unos 130 kilómetros al noroeste de Phoenix. Al menos 200 de las 500 viviendas de esa localidad han quedado dañadas por el incendio.

El incendio coincide con la intensa ola de calor que el fin de semana ha abrasado los estados del suroeste de EEUU como California, Nevada o Arizona, que ha llevado a los termómetros a superar los 45 grados y ha provocado centenares de hospitalizaciones.

En La Vegas la temperatura en el aeropuerto alcanzó su récord histórico de 47 grados y los servicios meteorológicos pronosticaban que en el Death Valley de California se iba a superar los 50 grados, cerca del hito de 53 grados de 1913.

Fuente: EFE