El exgeneral serbio Ratko Mladic, el presunto criminal de guerra más buscado del conflicto de la antigua Yugoslavia, fue arrestado por la policía serbia, confirmó en Belgrado el presidente de Serbia, Boris Tadic.

Mladic fue detenido bajo un nombre falso de “Milorad Komadic”, en una aldea de las proximidades de la ciudad Zrenjanin, en el norte de Serbia. “Hemos cerrado un capítulo difícil de nuestra historia reciente”, manifestó el presidente serbio ante la prensa.

La detención de Mladic se produce pocos días después de las más recientes críticas de Serge Brammertz, el fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY), que había acusado a Serbia de no cooperar plenamente con esa Corte.

Tras la captura de Mladic, Serbia debe seguir buscando a Goran Hadzic, el último de los grandes criminales de guerra serbios prófugos de la justicia.

Mladic, exjefe militar de los serbios de Bosnia, está acusado de genocidio en relación con la matanza de musulmanes de Srebrenica, el asedio de Sarajevo y otros crímenes cometidos durante la guerra de Bosnia (1992-1995).