Los pacientes del Hospital Salvador Allende, del municipio El Cerro, Cuba, sufren una mala atención por parte del personal y quedan desamparados.

Manuel Alberto Morejón, reportero del portal Cubanet, visitó durante varios días las instalaciones del hospital, conocido como Covadonga, y fue testigo de lo que muchos denuncian desde hace tiempo pero pocos pueden mostrar en público.

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Los ancianos que no tienen familiares como acompañantes quedan completamente desatendidos y la agonía es alarmante. Los pijamas y la poca ropa de cama con la que cuentan, después de días, quedan completamente mojadas de orina y excremento.

Esto, además de malestar, provoca una peste insoportable tanto para la persona que las usa como para el resto de los pacientes. Asimismo, las sondas están repletas de orina, y los sueros, vacíos.

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El reportero relata el caso de Albertina Puente Ortega, de 89 años, quien falleció el pasado 27 de febrero, a causa de “un cuadro de diarreas fétidas y amarillentas”. La ropa de la difunta permaneció tirada en el suelo durante un día completamente manchada de orina y excremento.

“Una visitante le reclamó a un enfermero y éste le respondió que no tenía guantes para recogerla. Tuvo que recoger la ropa ella misma y tirarla fuera del cubículo porque era insoportable la peste, además de las moscas que atraía”, escribió Morejón en Cubanet.

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El reportero sostiene que muchos de estos casos son escondidos por las autoridades y nunca logran salir a la luz. El último que sí se pudo conocer fue el del Hospital Psiquiátrico de La Habana, en enero de 2010, cuando 28 personas fallecieron por frío en una sola noche.

Fuente: Infobae.com