La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, internada desde hace cuatro días por un cuadro de sigmoiditis, deberá guardar reposo por diez días para continuar con el tratamiento una vez que reciba el alta.

Sin embargo, los médicos de la mandataria argentina precisaron que “posterior al alta de internación, que se otorgará oportunamente, la presidenta deberá mantener reposo con control evolutivo en la residencia presidencial de Olivos”.

Agregaron que la mandataria no podrá “realizar desplazamientos inicialmente y como mínimo por diez días”, por lo cual no asistirá a la próxima cumbre del G20 en Brisbane.

En su lugar viajarán el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el canciller Héctor Timerman.

Este nuevo episodio de su salud la obligó a suspender la visita que la presidenta chilena Michelle Bachelet tenía previsto realizar este martes a Buenos Aires para conmemorar los 30 años de la firma del Tratado de Paz entre Argentina y Chile.