El último jueves, los dos principales partidos políticos votaron abrumadoramente para dar inicio al proceso de impugnación este viernes, en donde se evaluó la responsabilidad política de Lugo en el incidente.

El presidente guaraní argumentó que el proceso es inconstitucional, ya que se le dieron menos de 24 horas para preparar su defensa. La votación final fue de 39 votos a favor, cuatro en contra y ninguna abstención.

El actual vicepresidente, el liberal Federico Franco, deberá asumir la Presidencia de Paraguay en las próximas horas, según la Constitución. Lugo y sus aliados del ALBA alegaron un “golpe de Estado en marcha”.

Lugo fue apartado del cargo a pedido de la Cámara de Diputados (instancia acusadora) que alegó mal desempeño en sus funciones. Por mayoría (76 votos contra 1), la Cámara Baja aprobó el libelo acusatorio para someterlo a juicio político.