Francisco Ramirez Alvarado (50), un reconocido pediatra de la ciudad de Curicó, al sur de Santiago de Chile, presuntamente asesinó a tiros a sus tres hijos de 17, 16 y 14 años para luego quitarse la vida al interior de su domicilio.

Por su parte, la madre de los niños, Pilar Merchack, fue internada en una clínica local tras descubrir el asesinato de sus hijos. Luego pudo recibir al fiscal, al cual le dio la primera versión de los hechos.

El fiscal a cargo del hecho, Mauricio Richards, detalló que “hasta el momento se ha podido establecer que hubo cinco disparos. Uno de los menores tenía dos disparos, los otros tenían uno cada uno, y el quinto disparo lo recibió el padre”.

Asimismo, dijo que, según los antecedentes recabados, debió ocurrir alguna “situación familiar” traumática, pero que todo está en investigación. Consultado sobre un eventual consumo de alcohol y drogas por parte de la pareja, indicó que “nada se descarta”.

“Hay indicios de tratamientos en curso sobre medicamentos”, añadió, y ambos tienen un médico de cabecera a quien se deberá interrogar.

Por su parte, el jefe de la Fiscalía de Curicó, Miguel Gajardo, anunció que no existían denuncias formales de violencia familiar. “La tesis más razonable que estamos analizando son problemas conyugales que por alguna circunstancia, que aún estamos investigando, desencadenaron este hecho”, dijo.