Unos 500 presos talibanes escaparon este lunes de la cárcel de Kandahar, ubicada en el sur de Afganistán, gracias a un túnel de 300 metros que excavaron durante cinco meses.

La fuga se inició a las 11 de la noche cuando los únicos tres prisioneros que sabían del plan despertaron uno por uno a sus compañeros y empezaron a escapar. El último salió de la prisión a las 3:30 de la madrugada.

Por su parte, el portavoz de dicho penal, Zalmai Ayubi, indicó que “hemos capturado ya a trece de ellos; algunos tenían chalecos explosivos. En el penal de Kandahar había en total 1.000 prisioneros”.

Asimismo, el gobernador de la ciudad Kandahar precisó en un comunicado que en total se fugaron 475 reclusos y aseguró que se ha puesto en marcha un dispositivo de búsqueda para localizarlos.