La foto de un niño brasileño con un cartel de publicidad suspendido de su cuello se ha viralizado en las redes sociales y despertó la indignación de miles de internautas.

Se trata de una imagen que comenzó a recorrer en Twitter y cuyo autor, César Hernandes, asegura haberla tomado en uno de los barrios más aristocráticos de San Pablo: Brooklin.

El niño de color, de aspecto humilde y de corta edad, contrasta con el “hombre cartón” que sostiene hasta 9 horas diarias caminando por las calles de ese barrio de clase alta brasileño. La publicidad expone a un joven blanco, rubio y de ojos claros.

El anuncio promociona departamentos en una de las zonas más exclusivas de Sao Paulo, de uno y dos dormitorios. Stúdios, como le dicen en Brasil, que experimenta un verdadero boom inmobiliario en las grandes ciudades.

El contraste y el trabajo precarizado del pequeño han despertado la ira y la indignación de los cibernautas en las redes sociales: una labor de estas características es retribuido con tan solo 18 dólares al día.

La tarea exige recorrer las calles durante 8 y 9 horas diarias, según consigna el diario El País de España. Muchos de ellos no tienen contrato ni seguro de vida para ese tipo de trabajos, por lo cual es considerado ilegal.

Fuente: Infobae.com