El Papa Benedicto XVI llamó a la juventud del mundo a que abra los ojos ante “la superficialidad, el consumismo y el hedonismo imperantes, tanta banalidad a la hora de vivir la sexualidad, tanta insolidaridad y tanta corrupción”.

En el primer discurso que pronunció tras su llegada a Madrid para participar en la Jornada Mundial de la Juventud, el pontífice alemán, de 84 años, condenó también el materialismo y el egoísmo, y expresó su preocupación por problemas y peligros que enfrentan muchos jóvenes como el desempleo, la drogadicción y la discriminación.

“Muchos jóvenes miran con preocupación el futuro ante la dificultad de encontrar un empleo digno, o bien por haberlo perdido o tenerlo muy precario e inseguro”, afirmó Benedicto XVI durante la ceremonia de bienvenida en el aeropuerto internacional de Barajas, cita la agencia DPA.

Ante los reyes Juan Carlos y Sofía y el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, entre otras personalidades que acudieron a recibirlo, el jefe de la Iglesia Católica señaló que hay otros jóvenes que “precisan de prevención para no caer en la red de la droga, o de ayuda eficaz, si por desgracia ya cayeron en ella”.