Según reseña el diario inglés Daily Mail, la mujer que trabajó como banquero de JP Morgan antes de conocer a su marido, paga fuertes sumas de dinero por pedidos de comida occidental, gasta en lujosas lámparas, etc.

El matutino describe a la mujer como “una rosa en el desierto”, que utiliza su elegancia y estilo occidental para enmascarar la creciente brutalidad del régimen asesino de su marido.

Asma Al Asad se refugia en un búnker a prueba de bombas y para escapar de los misiles estadounidenses y que se espera, podrían caer sobre dicho país. Se sabe que compra a través de terceros productos de diseño extravagante, alimentos y productos para la salud, así como líneas de bella, mientras país se derrumba a su alrededor.

Mientras que más de 100 mil hombres, mujeres y niños han muerto y casi dos millones de sirios han huido desde marzo de 2011, Asma, de 38 años, protagonizó un escándalo por la compra de lámparas de araña de cristal de Bohemia de Praga.

Ella también ordena regularmente comida occidental a granel para sus tres hijos ya que no quiere que coman comida Siria, de acuerdo a diversas fuentes.

Debido a las sanciones, los productos son importados a Siria a través del Líbano.

Recientemente Asma viajó a Líbano a sí misma para reunirse con sus padres, el londinense Fawaz Akhras, cardiólogo consultor, y Sahar Otri al-Akhras, una diplomática siria en retiro.