Los gobiernos regionales de los 16 estados alemanes han respaldado un plan para solicitar a la Corte Constitucional quitarle la legalidad al Partido Nacional Democrático, de extrema derecha, acusado de promover la ideología neonazi.

La próxima semana la cámara alta del Parlamento alemán (Bundesrat) votará sobre si se debe presentar la solicitud.

La canciller Angela Merkel ha advertido de que el caso contra el partido debe ser muy fuerte, ya que el fracaso de un intento de prohibición podría fortalecer al partido.

En 2003 hubo un intento similar ante el Tribunal Constitucional, que resultó fallido.