Aproximadamente el 40 por ciento de los factores que detonan que un empleado salga de la organización tienen relación con cambios estructurales al interior de la empresa. Sin embargo, los empleados pueden tener en su desempeño y su conducta la decisión de ser despedidos de sus empresas.

De acuerdo a expertos, la mala relación con el jefe y con los compañeros de trabajo provoca el 60 por ciento de los despidos.

Señales de alerta

CNN Expansión señala que la salida de un empleado no suele ser una decisión que se tome de un día para otro, por lo que debes abrir bien los ojos para ver si alguna de estas señales de alerta se está dando en tu lugar de trabajo.

1. El jefe evita reuniones contigo. Es un síntoma claro de que las cosas están mal cuando el encargado de retroalimentar al empleado evita reunirse con él. Si estás en esta situación y tienes la intención de mantener el puesto, debes buscar retroalimentación para revertir la situación.

2. Cero actualizaciones. Si los permisos para salir a actividades de actualización, conferencias o hasta actividades relacionadas con el propio trabajo van disminuyendo. Aunque el despido no se lleve a cabo, es una señal de que el empleador no considera interesante la aportación que su colega hace. “Es la actitud, te tengo porque sacas trabajo, no importa si creces”.

3. Empresa en venta. Si la compañía donde fue adquirida por otro grupo, seguramente hay alguien más que hace tu trabajo y duplicar funciones aumenta los costos de la compañía. Es recomendable preparar un informe detallado de por qué uno se considera valioso para la organización. Hay que evitar caer en el error de utilizar las reuniones con los nuevos directivos para quejarse del jefe o el ambiente de trabajo.

4. Control excesivo. Si ahora el jefe parece llevar un registro de todas las acciones realizadas en el horario laboral, incluyendo los minutos extras de la hora de comida, y los utiliza para reprochar un mal rendimiento.

Fuente: Cnnexpansion.com