Las relaciones de pareja nunca son fáciles, más aún en estos tiempos en los que, las personas se han convertido en esclavos del trabajo. No permitas que tu vida amorosa corra peligro por dedicarte a tu vida profesional; con estos consejos lograrás el balance perfecto.

- Programa un tiempo juntos

Tan importante como tu trabajo es tu vida amorosa personal, por lo que es necesario satisfacer las necesidades de ambos aspectos de tu vida. Organízate y separa citas con el ser amado con la misma firmeza con la que planificas tus reuniones de trabajo. Programa también fechas especiales, como cenas románticas mensuales o los fines de semana de relajación total viendo películas.

- Evita el comportamiento reactivo

No te conviertas en un esclavo de tu trabajo. Recuerda que todo tiene un momento y cuando sea momento de descansar y disfrutar con tu pareja, debes hacerlo. La próxima vez que recibas un mail de “emergencia” durante un tiempo familiar, pregúntate cómo tu reacción afectará a tu relación.

- El romance beneficia tu vida laboral

El romance es bueno para tu trabajo porque te hace feliz y reduce tus niveles de estrés.

- No lleves el trabajo a la habitación

Tu habitación, o el espacio especial que compartas con tu pareja, no puede tener carga laboral. Deja todos tus asuntos profesionales fuera y haz de este espacio un santuario de relajación y romance.

- Comunícate con tu pareja

Si no vives con tu pareja, procura no descuidar la comunicación entre ustedes. Antes de dormir, por ejemplo, separa una media hora para conversar con tu novio o novia.