El trabajo doméstico realizado, en mayor proporción, por las mujeres en nuestro país le resta posibilidades de desarrollo profesional y personal al tener que dedicar su tiempo a labores que muchas veces, podrían ser asumidas por el Estado si contáramos con las debidas políticas de atención social.

Entre las cifras más resaltantes obtenidas de este estudio, podemos conocer que, en promedio, las mujeres dedican 2/3 más de su tiempo a las labores domésticas en comparación con los hombres, e incluso las mujeres de áreas rurales, trabajan unas 10 horas más que las mujeres en zonas urbanas.

Otros aspectos a rescatar, comenta Ana María Yáñez, exdirectora del Movimiento Manuela Ramos, son que tanto la edad, educación, tipo de vivienda y estado civil son factores que determinan el tiempo que se dedica a las labores domésticas; siendo las mujeres más educadas las que menos trabajan en casa con un promedio de 28 horas semanales, versus las 45 horas que dedican las mujeres sin educación.

Igualmente, las mujeres con viviendas inadecuadas trabajan 46 horas mientras que las que cuentan con una casa adecuada para vivir trabajan en promedio 39 horas a la semana. La edad también influye siendo el rango entre los 30 y 39 años donde se ve un aumento en las horas de trabajo doméstico.

Por otro lado, el Ministerio de Trabajo, al cuantificar monetariamente este trabajo, indicó que el mismo equivale al 25% del PBI Nacional. Yáñez agregó que lo que busca este estudio no es una remuneración económica, sino la mejora y creación de servicios públicos que ayuden al desarrollo profesional, económico y personal de las mujeres.