Trabajar para dos personas al mismo tiempo puede ser complejo. El mayor reto en este escenario es superar problemas para priorizar los encargos e identificar cuál de ellos solucionar primero.

Siempre habrá un jefe que demande más atención y eso puede alterar tiempos de entrega, calidad de resultados y tu salud, dijo Olga Castanyer, psicóloga especialista en terapia conductual. Antes de pretender ampliar las jornadas de trabajo en fin de semana, revisa estas sugerencias:

1. Evita el impulso perfeccionista. Al querer atender con la misma atención a todos, a muchos colaboradores en lugar de ‘frenar’ y definir qué asunto requiere prioridad, “les da por hacer exhibiciones de valía”, señaló Castanyer. Si estableciste límites evita sobrepasarlos por quedar bien o por demostrar algo que nadie te pide cumplir.

2. Uno de los jefes quiere un ‘extra’. Fija hasta dónde llegan tus responsabilidades en un proyecto (por ejemplo entregar en cierta fecha un reporte) y qué es aquello que no te corresponde hacer. Si te aferras a tener una respuesta a todas las presiones que haga cada jefe, llega el momento en que no podrás cumplir con los compromisos adquiridos y quedarás mal.

3. Practica la asertividad. Ante demandas que, de antemano, sabes que no podrás cumplir, lo primero es decir un “no” directo, a fin de evitar sobrecargarse con nuevos planes. Si te atemoriza quedar mal con ese jefe, puedes acudir a respuestas de “aplazamiento asertivo”, como: “Hago lo que puedo y quedará listo en determinada fecha”. A veces no se puede ser sincero ante preguntas inquisitivas, pero tampoco se valen falsas promesas, aclaró Olga Castanyer.

Fuente: Cnnexpansion.com