Resulta sumamente importante que nuestro perfil sobresalga sobre los otros. Por lo que antes de planear la estrategia, es importante pensar ¿en qué soy bueno?, ¿en qué sector quiero desarrollarme?, ¿qué tipo de trabajo deseo?
El uso de las tecnologías de información y comunicación se ha convertido en un aliado laboral, por lo que debemos aprovechar las redes sociales, plataformas virtuales, portales de empleo y todo lo que esté a nuestro alcance para darnos a conocer.
Aunque es bastante laborioso, no dejes de subir tu CV en los portales de búsqueda de empleo. Es importante que no utilices el “copy-paste” de tu curriculum en papel. Haz uso de tu capacidad para sintetizar y enfocar tu perfil a elementos que destaquen tu talento, conocimientos, experiencia y habilidades. Considera también, si tu perfil te lo permite, el poder realizar un videocurrículum para difundir tu búsqueda. Puedes utilizar también el software interactivo Prezi, donde puedes incorporar vídeo, audio y animación.
Investiga en qué medios o redes se mueven las empresas en las que te gustaría trabajar. La mayoría de las empresas tienen perfiles en LinkedIn, por lo que puede ser una herramienta fundamental para contactar con profesionales de dichas empresas, mediante los grupos abiertos a los que pertenecen. No sólo te cierres a redes profesionales, investiga y contacta en otras redes sociales. En Twitter puedes convertirte en un experto sobre un tema, en Facebook y Google+ puedes seguir las páginas de empresa que te interesen.
Trabaja tus contactos. Lo importante de este punto, es que aportes y compartas información que sea de valor y atraiga su atención. Puedes crear un blog donde publiques información generada por ti o donde puedas compartir un estudio o un artículo interesante para el sector. Trata de hacerlo una rutina para que tus contactos te identifiquen como alguien que cuenta con información valiosa.
Fuente: Adams Capacitación