Te compartimos los seis errores más comunes cometidos por los emprendedores que trabajan desde casa:

Pasar mucho tiempo en casa

Al comenzar a trabajar desde casa es común tener que enfrentarse al aislamiento y la soledad que este tipo de rutina significa. Si bien es sencillo entablar todos los asuntos de manera virtual, no cae nada mal tomar un tiempo para organizar reuniones cara a cara con clientes, proveedores, colaboradores, etc.

Tener un horario 24-7

Los inicias de toda empresa son momentos muy demandantes, por lo que es usual que los emprendedores se descubran trabajando día y noche en el comedor de su casa. Pero esta fórmula es la receta perfecta para el cansancio y el desgaste. Date el tiempo suficiente para desconectarte de tus labores y asegúrate de tener siempre un tiempo reservado para ti mismo.

Permitir interrupciones

No tener al lado a un jefe vigilando tu trabajo hace que sea sencillo distraerse y entrar en un “modo de interrupción”, atendiendo llamadas personales, revisando los correos electrónicos, etc. Este comportamiento puede afectar el enfoque de tu negocio y evitar que cumplas con importantes tareas, así que asegúrate de dejar en claro que solo puedes ser interrumpido si se trata de una emergencia.

No tener un área de trabajo

Todo emprendedor que trabaja desde casa debe determinar un área que será dedicada únicamente para el trabajo. Elige una habitación poco usada o un rincón vacío donde puedas marcar la diferencia física entre el trabajo y la casa, estableciendo un área similar a la oficina con la que contarías en cualquier otra empresa.

Ser desorganizado

Cuando el trabajo se acumula, es fácil ser desorganizado. Es fácil caer en la desorganización cuando trabajas en el mismo lugar que en el que vives, puesto que también es un espacio donde no sueles convivir con empleados o visitas.

Iniciar el día sin un plan

Sin tomar decisiones a consciencia sobre cómo usar el tiempo, tu día se puede ir sin haber hecho algo productivo. Organiza tu tiempo para realizar tareas a corto plazo y otras que beneficien a largo plazo de manera que tu negocio esté más balanceado. Crea un horario y atente a él. También, asegúrate de dejar tiempo libre en tu agenda para atender asuntos inesperados.

Fuente: Plusempresarial.com