Descubre cuáles son esas indeseables cualidades que pueden guiarlo por el camino a convertirse en un mal jefe:
- Pasas todo el día gritando por las cosas que se hicieron y por las que no se hicieron. Pero nunca es culpa de él, sino de los “inútiles que no lo entienden”.
- Realmente nadie te entiende, especialmente porque tus palabras exaltadas sólo ahuyentan la inteligencia y producen tanto estrés en tu equipo que todos prefieren alejarse apenas abres la boca.
- Las reuniones programadas 10 minutos antes de la hora de salida son tus preferidas, ya que así te aseguras que nadie llegue pronto a su casa y permanezcan más del tiempo necesario en reuniones innecesarias en la oficina.
- Envías correos a cualquier hora del día, incluso fuera del horario laboral, y esperas que las tareas sean realizadas en ese mismo momento. Luego, no contestas ni dice nada hasta varios días después.
- Tienes a las personas trabajando en labores que no corresponden con su cargo, su formación ni sus intereses. Pero no importa, ya que todos saben muy bien donde queda la puerta.
- Jamás da permiso a tus empleados para que tomen cursos, ya que crees que todo el conocimiento se puede obtener con el trabajo y cualquier tipo de formación académica es solamente una pérdida de tiempo.
- No programas una cena navideña o un pequeño saludo por el cumpleaños de alguno de tus trabajadores. Es más: no asistes a la cena de Navidad aunque sea como invitado de tus trabajadores.
Fuente: Plusempresarial.com