Usualmente los emprendedores se preparan con tiempo para presentar su idea de negocio. Parte de esta preparación implica contar con apoyo audiovisual, tener a la mano documentación y una potente exposición de sus ideas. Pero, ¿qué sucede cuando te piden que expliques toda tu propuesta en tan solo un minuto?

En vez de palidecer y creer que es imposible conseguir exponer toda tu propuesta en tan poco tiempo, concéntrate en dar una breve respuesta a estas preguntas:

1. ¿Qué haces?

2. ¿Qué problema solucionas?

3. ¿Por qué tu producto o servicio es diferente?

4. ¿Cuál es su importancia?

Al tener una respuesta breve para cada pregunta, desarrollarás una historia concisa. De ahí que expresarla debería tomar menos de 60 segundos.

Tomemos el ejemplo de un emprendedor que recién inicia una franquicia de servicios de limpieza para el hogar y que busca tanto clientes como inversionistas. Basándose en esas cuatro preguntas, la historia de la empresa se podría resumir así: “Tenemos un servicio de limpieza de cinco estrellas, amigable con el medio ambiente, que te consiente a ti y a tu hogar (lo que tu negocio hace)”.

Con esta primera descripción sencilla, directa y contundente serás capaz de atrapar la atención de los demás, y estarás creando en ellos un espacio para pensar en ut negocio como un futuro caso de éxito. A partir de la primera afirmación, debes pasar a explicar con un poco más de detalle el trabajo de tu empresa y enfocarte incluso en presentar un pequeño ejemplo del funcionamiento y las ventajas que ofrecen.

Fuente: Plusempresarial.com