Y además de saber qué cosas debes hacer, también es importante que conozcan las razones que podrían detener tu camino al liderazgo.

Ofensas a los demás

Es parte del trabajo de un líder realizar feedback y críticas al trabajo del equipo (y al suyo mismo), pero eso no significa ofender a los demás, ni en público ni en privado. Las ofensas se terminarán convirtiendo en resentimientos y obstáculos para el trabajo de equipo.

Las críticas mal dirigidas

Criticar un comportamiento o actitud es una actividad que se debe realizar de manera privada, en una conversación de a dos. A su vez, todo líder debe evitar hablar a espaldas de los demás para no terminar creando rivalidades y dificultades en los equipos.

Tener favoritos

El favoritismo hacia determinada persona conlleva a que el resto del equipo se sienta desplazado, poco reconocido y valorado. Nadie debe ser imprescindible en un equipo, pero a la vez nadie debe ser tratado como menos importante.

Marcar distancias del equipo

Si no te sienten como parte del equipo, entonces no te considerarán como uno de ellos. Preocúpate por los integrantes de tu equipo, lucha por ellos y ofréceles oportunidades para progresar. Contribuyendo a su desarrollo personal y profesional te ganarás su lealtad.

Vacilar al tomar decisiones

Tomar una decisión rápida y acertada es un signo de capacidad en el liderazgo y de superación personal y profesional. No alardees nunca de tus éxitos, ni de las decisiones acertadas y menos de tu capacidad de trabajo.

Falta de voluntad

Ningún líder auténtico está demasiado ocupado como para atender un llamado de su equipo. La poca voluntad para el servicio te alejará de los demás trabajadores. Como buen líder, debes ser capaz de ejecutar cualquier tipo de trabajo que le pedirías a otros.

Celebrar el conocimiento

Esperar reconocimiento en base a los conocimientos con los que cuentas no es propio de un líder. Deja que las gratificaciones lleguen gracias a las acciones que realizas en base a tus conocimientos.

Miedo a los sucesores

Si un líder no es capaz de permitir que el resto de su equipo se desarrolle por temor a que uno de ellos ocupe su cargo en el futuro, entonces está acabado desde ya. Es el miedo el que hará que este temor se convierta en una realidad y el líder termine perdiendo su posición a causa de su egoísmo y falta de visión.

Egocentrismo

Si un líder recibir reconocimientos personales por el trabajo de todo un equipo, perderá rápidamente la confianza y lealtad de sus trabajadores, quedando sumido en un ambiente de soledad y sin profesionales al lado de quienes trabajar.

Fuente: Plusempresarial.com