El Gobierno español advirtió que “vigilará” que Bolivia pague un “justiprecio” por la expropiación de Transportadora de Electricidad, filial de la española Red Eléctrica Corporación, aunque aseguró que esa medida no tendrá ningún “efecto relevante” en las cuentas de la compañía.

“El Gobierno español va a vigilar y va a atender en lo que es efectivamente la asistencia al justiprecio en estas inversiones”, afirmó el ministro español de Economía, Luis de Guindos, en Bruselas.

De Guindos quiso así, en la primera reacción de Madrid tras la decisión boliviana, lanzar un mensaje de firmeza ante lo que constituye la segunda expropiación a una empresa española en 15 días en América Latina.

El aporte de la boliviana Transportadora de Electricidad “a las cifras de negocios del grupo Red Eléctrica Corporación es de un 1,5%”, por lo cual “no tiene un efecto relevante en los negocios y cuenta de resultados” del grupo, afirmó la empresa española en un comunicado.

REE, a través de Red Eléctrica Internacional (filial encargada de inversiones en el exterior), compró en 2002 el 99,94% de TDE por unos 89 millones de euros.

“Acciones de este tipo envían una señal negativa a los mercados sobre el clima de negocios para invertir en Bolivia. Confiamos en que las autoridades bolivianas cumplan sus compromisos de inversión con España y garanticen una compensación rápida y adecuada”, subrayó el portavoz de Comercio de la Comisión Europea, John Clancy.

Fernández pidió una respuesta “más contundente” de Madrid porque “luego podrían venir otros países, como Ecuador o Venezuela”, con gobiernos que ostentan agendas nacionalistas.

Morales promulgó la medida en medio de protestas de sindicatos obreros en La Paz y varias ciudades de Bolivia por un incremento salarial superior al 8% y de médicos y paramédicos que rechazan un decreto que sube la jornada laboral de 6 a 8 horas.

Fuente: Agencias