La familia se apoya y tiene la ventaja de conocerse, por otra parte, pueden haber discusiones y desacuerdos luego de que se termina la primera generación.

RETOS A SUPERAR ENTRE FAMILIA

La continuidad generacional: Es cuando ha pasado el suficiente tiempo y el acuerdo de negocio que una vez se hizo entre familiares ha pasado a la siguiente generación, pueden surgir conflictos y desacuerdos entre los allegados de la próxima generación por lo que si no se superan la empresa estará en riesgo.

El crecimiento y volumen: enlazado con el punto anterior; al pasar a la siguiente generación puede darse una mayor cantidad de familiares a los cuales habrá que poner de acuerdo en cuanto al sistema de la empresa.

LA FORMACIÓN DE PROFESIONALES

Entre cada persona perteneciente a la familia habrán nuevos profesionales de distintos ámbitos y con ello se tiene una gran ventaja. Lo bueno de que la empresa pase a una nueva generación es que algo que ya está consolidado puede crecer todavía más si los familiares siguen el ejemplo de sus predecesores. La consejería y la negociación juegan un papel importante para la gestión de una empresa familiar, ambos pertenecen a la formación de cada pariente que constituye una parte de la empresa familiar.

Es necesario que en el seno de esta empresa exista total transparencia en la concentración de la fuerza económica, se distribuyan los bienes de forma adecuada, se cumplan los respectivos requisitos legales para preservar la identidad de la empresa, se defina de forma clara y justa la separación de los inversionistas, se den a conocer los resultados y toma de decisiones entre todos los miembros y se definan las estrategias de sucesión para las siguientes generaciones.

Fuente: Plusempresarial.com