Un error muy común entre los nuevos empresarios es mezclar los gastos de su negocio con los personales. Utilizan la tarjeta de la empresa para comprar artículos para el hogar o para pagar deudas. Este mal uso de las finanzas empresariales podría provocar una crisis en el negocio o incluso su desaparición.

Por ese motivo, es muy importante que aprendas a separar tus gastos personales de los de tu empresa. Te dejamos tres valiosos consejos que te ayudarán a administrar de forma correcta tu dinero.

1. Abre una cuenta bancaria de uso exclusivo para tu negocio. Así evitarás mezclar el dinero y podrás visualizar mejor los ingresos y egresos de tu empresa.

2. Define un sueldo fijo para ti mismo con el que puedas solventar tus gastos familiares. Esto te ayudará a controlar el dinero que extraes de tu negocio. Es importante que, si apenas estás empezando con tu empresa, te fijes un sueldo que no dañe las finanzas de esta, pero que esté lo más acorde posible con las labores que desempeñas.

3. Evita financiar tu empresa con préstamos personales, pues las tasas suelen ser más elevadas. Existen préstamos diseñados especialmente para quienes quieren empezar un negocio.

Fuente: Plusempresarial.com