Para evitar que el pasillo no se sienta encerrado y lúgubre, se recomienda usar elementos como:

- Límites permeables, no sólidos, como materiales translúcidos, celosías, barandales, caídas de agua o ‘muros’ de bambú.

- Tragaluces en el techo o pergolados al aire libre.

- Cambio de nivel o puentes elevados para omitir las bardas.

- Usar distintos materiales en piso, paredes y/o techos ayudan a enmarcar los andadores.

- El uso de luz natural o la iluminación artificial, enfatizan el estrecho y largo perímetro.

Es importante que en el pasillo se ubique algo que sea llamativo o posea algún encanto que despierte el interés en el usuario y le invite a recorrerlo por el gusto de hacerlo, no simplemente para llegar a otro lugar.

Fuente: metroscubicos.com