Explicó que en los próximos dos años se ejecutarán obras de agua para demostrar la disposición de cantidad suficiente de este recurso hídrico, y que luego evaluarán la situación sobre la conveniencia de seguir desarrollando el proyecto.

“Para nosotros esto es muy frustrante. Lo que queremos es que haya un proyecto que sea aceptado por la población”, remarcó al referir que Conga tiene la aceptación del 80% de la población adyacente a la mina.

Roque Benavides recordó que cuando paralizaron el proyecto, en julio de este año, la empresa minera perdió 2 millones de dólares diarios. “Antes había 6.000 personas trabajando; hoy hay menos de 1.500 personas laborando”, expresó.

En tanto, el director ejecutivo de Newmont, Richard O’Brien, envió una carta a los trabajadores del proyecto minero Conga en la que los llama a la calma y les asegura que esta obra sigue en los planes de Newmont.