Casualmente hoy, al cumplirse 265 años del sismo de 9.0 Mw (escala del momento) que ocasionó más de 20 mil muertos, un fuerte sismo sacudió la Capital, causando un gran susto en la población.
El terremoto y maremoto de Lima y Callao de 1746 ocurrió el 28 de octubre de 1746 en la costa central del Perú. Aquel día, los habitantes de Lima fueron sorprendidos por las violentas sacudidas de la tierra que obligaron a todos a salir de sus casas y buscar los lugares descampados. Por desdicha no todos pudieron hacerlo.
La duración del sismo, según las relaciones del tiempo, fue de tres a cuatro minutos, tiempo más que sobrado para una destrucción total de la ciudad. Lima tenía 60,000 habitantes y contaba con 3,000 casas, repartida en 150 manzanas. Cayeron las partes altas de templos, conventos, mansiones y diversas construcciones; culminado el sismo nubes de polvo ocultaron la visión de la población.
La noche fue verdaderamente angustiante, aún sin saberse todavía en Lima la desgracia del vecino puerto del Callao, que fue arrasado por un maremoto. Muchos, para no quedar sepultados entre las ruinas, así como para hallar amparo en la compañía de los demás, se refugiaron en la Plaza Mayor y otros se retiraron al fondo de sus huertas, de modo que en las casas que aún permanecían en pie o entre los escombros de otras reinaba un gran silencio.
Amaneció el día sábado 29 de octubre y los ojos de los sobrevivientes contemplaron con espanto la ruina de la ciudad. De las tres mil casas que componían las ciento cincuenta manzanas que se encerraban dentro de las murallas de Lima, apenas veinticinco se mantuvieron incólumes.
Fuente: Wikipedia .