Se pondrá especial énfasis en medidas preventivas para enfrentar de manera adecuada las emergencias ocasionadas por sismos, especialmente las que deben proteger a los peatones y vecinos que se encuentren en las vías aledañas y los predios circundantes a la obra de construcción.

Rosenthal señaló que en lo que va del 2013, la comuna de San Isidro ha paralizado 95 obras de construcción que no cumplían con medidas de seguridad y que subsanaron oportunamente las deficiencias observadas; ahora la verificación va a ser más exigente.

El funcionario señaló que entre los accidentes en obras de construcción más comunes en casos de sismo figuran las caídas que pueden producirse por resbalones, interrupciones en el pavimento o cambios en el nivel del piso. También pueden suceder impactos con elementos del edificio fruto del movimiento sísmico.

Otro de los riesgos en casos de sismo es la caída de objetos durante o después del sismo, por ello las construcciones deben contar con mallas de protección en adecuadas condiciones para amortiguar la posible caída de escombros, ladrillos y otros materiales en veredas o calles, lo cual es un riesgo para peatones y vehículos.

Las instalaciones eléctricas también constituyen un serio problema por el riesgo que constituyen los cables sueltos e instalaciones precarias en obras de construcción.

Otro de los riesgos que puede afectar una adecuada evacuación de los peatones en casos de sismo son las montañas de arena, veredas en mal estado y objetos esparcidos en calles y aceras.

Rosenthal destacó que, la Municipalidad de San Isidro ha realizado varias charlas preventivas sobre medidas de seguridad en obras de construcción y demolición, a la que asisten representantes de varias empresas constructoras que operan en el distrito.