Nueve estudiantes de la carrera de Ingeniería Aeronáutica de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP) vienen trabajando desde hace un año en el diseño y ejecución de un avión no tripulado que participará en el concurso internacional SAE Aerodesign, que este año se llevará a cabo en Brasil.

Los integrantes del proyecto Tunqui (gallito de las rocas en quechua) son parte de todas las fases del diseño completo de una aeronave. Ellos, a través de un software especial, han creado cada parte de la nave que ponen a prueba en los laboratorios de su universidad y así saber si estas soportarán las cargas que se van a aplicar.

“Es un alto desafío para los alumnos de Ingeniería Aeronáutica porque conlleva muchos factores que se ven en la vida real, como trabajo en equipo, organización institucional, buen manejo del inventario, manejo de metas en plazos determinado, búsqueda de patrocinio, entre otras cosas”, cuenta a Peru.com uno de los integrantes del proyecto, Giulio Gallegos.

El proyecto Tunqui cuenta con el apoyo de la UTP y el SEMAN, una compañía aeronáutica, que apoyará con sus instalaciones en la fase de ejecución de las tres aeronaves. Sin embargo, los estudiantes continúan con la búsqueda de patrocinio para poder solventar los gastos que implican el viaje a Brasil, como pasajes y el flete que involucra llevar el pequeño avión.

Gianmarco Lopez, Guillermo Vero, Andrés Canora, Angie Nava, Miguel Quispe, Christian Ayala, Miguel Yanarico, Leonardo Ruiz y Giulio Gallegos se han puesto como objetivo ubicarse entre los diez primeros puestos en este concurso que reúne a cerca de 90 equipos de 5 países de la región.

DISEÑO Y CONSTRUCCIÓN

El diseño y ejecución de la nave, que será controlada desde tierra, se rige bajo los requisitos que da la competencia y que son conocidos con meses de anticipación por los participantes, que tendrán que ir reportando al jurado el avance de su proyecto.

“Leemos las reglas y según las limitaciones comenzamos con el proyecto conceptual. Primero vemos la configuración externa de lo que sería el avión, como el tipo de alas, de cola y los diversos tipos de trenes de aterrizaje. Luego viene el proyecto preliminar donde se hacen los cálculos con mayor precisión y se ve qué materiales se emplearán”, indica Gallegos.

El desafío de la competencia es cargar el mayor peso posible siendo la aeronave vacía lo más leve posible, es decir la eficiencia estructural tiene que ser la más alta para poder ganar. A su vez, existen otros requerimientos que se tienen que tomar en cuenta, como utilizar la menor distancia de pista para el despegue y que suman a la puntuación del equipo.

Asimismo para la ejecución del avión se emplearán elementos como fibra de carbono, espuma estructural de alta resistencia, madera balsa y combustible nitrometano, todos elegidos con el objetivo de lograr el mejor desempeño posible. “Aquí nada es al azar, todo es escogido cuidadosamente y con cálculos”, dice Gallegos.

El largo de las alas es de casi tres metros, mientras que cuenta con dos metros de profundidad (de la nariz a la cola) y casi 80 centímetros de alto, pudiendo cargar 15 kilos de carga total, es decir, 4 veces su peso.

DATOS

3 aeronaves montarán el equipo. Una de prueba, mientras que las otras dos competirán en Brasil.

10 mil soles es el costo de cada aeronave que serán financiadas por la UTP.

90 equipos de cinco países participarán en la competencia SAE Aerodesign en Brasil.

Para conocer más en detalle el proyecto, puede visitar su fanpage: facebook.com/TunquiAerodesign

Por: Oscar Guerrero (@oscwarrior)