“La ropa apretada, principalmente la confeccionada con telas pesadas, puede perjudicar la circulación sanguínea y causar, además de dolores, la aparición de várices”, dice el médico angiólogo Augustus César de Araújo. En el caso de los jeans, incluso con tela elastizada éstos comprimen el cuerpo y perjudican el paso de la sangre.
Pero esos no son los únicos efectos que puede causar la ropa muy apretada. Dificultades en la digestión, cansancio atípico y problemas ligados a los órganos sexuales son algunos de los riesgos que se corren al privilegiar las piezas ajustadas en el armario.
Circulación bajo riesgo
La ropa apretada puede dificultar el retorno de la sangre venosa, que pasa mucho tiempo en los miembros inferiores. Las prendas generan presión a lo largo de las piernas y de la región abdominal, si no cuentan con una graduación adecuada.
Várices
Las várices perjudican principalmente a las mujeres. La causa es que la progesterona, una de las hormonas femeninas, causa la dilatación de las venas más allá del calibre normal. Cuando se usa ropas apretadas, perjudica su circulación y entra a formar parte de esas estadísticas. Principalmente si hay casos de várices en su familia.
Celulitis
La ropa apretada no causa celulitis, pero sí retrasa el tratamiento de la dolencia y puede favorecer la aparición de los agujeritos en la piel. Cuando la piel presenta la formación de nódulos de grasa causantes de la celulitis, la circulación sanguínea se ve perjudicada.
Respiración
Ropa muy apretada o un cinturón ajustado obstruyen el correcto paso de aire por el cuerpo. Como resultado, usted practica la llamada “respiración corta” la mayor parte del día, o sea, la respiración sólo llega hasta la parte alta del tórax.
Digestión
El problema, en este caso, se debe principalmente a los pantalones y cinturones que aprietan demasiado en la zona estomacal y abdominal. Después de las comidas su estómago se dilata, por eso la presión de la ropa puede ocasionar que los ácidos del estómago fluyan hacia el esófago, causando acidez y reflujo.
Salud sexual
Entre las mujeres, el uso repetido de ropa apretada puede favorecer el corrimiento. Con la humedad y las altas temperaturas, la región genital es propicia al desarrollo de hongos y bacterias que pueden causar dolencias como la candidiasis.